domingo, 18 de enero de 2015

Peripecias en India

Por Enrique Barrera. Participé en el viaje del Club Amigos en Ruta a India en el verano del 2010. Uno de los días teníamos que ir de Nueva Delhi a Udaipur en un tren nocturno con literas. Fue toda una experiencia en ese país. El comienzo ya fue accidentado, atascazo en el acceso a la estación, bajada del bus y bicis para poder llegar a tiempo con la consecuente propina para los conductores para que fueran ligeros. Tan ligeros que en las curvas casi se ponían a dos ruedas. 


Llegada a la estación con todo el grupo corriendo de un andén a otro y saltando vallas porque llegamos apurados. En el tren caos para poder reconocer las literas de cada uno. No se pudo reservar un vagón completo, así que en grupitos nos fuimos acoplando por varios vagones. Las literas de dos alturas sin compartimientos llevaban cortinitas para separarlas del pasillo. Un sij jovencito salió espantado a otro vagón cuando empezaron a ponerse las chicas en las literas de alrededor. Claro, grupo de españoles, tangana asegurada en el vagón. Nos cortamos un poco cuando la gente comenzó a tumbarse. Daba cosa porque realmente no había separación de paredes. 

Lo mejor cuando terminamos de cenar un picnic que nos habían preparado y me ofrecí a tirar los desperdicios a la papelera. Voy por el pasillo con mi montaña de cajas y restos varios y no veo ninguna papelera. Con señas le pregunto a un local que dónde hay un sitio para tirarlo y presto me abre la puerta del vagón y me señala el exterior. Incrédulo le vuelvo a preguntar y me digo, pues vale, y toda la porquería se fue a la vía. Ahí estaban las vacas para hacerse cargo. Luego a lo largo del viaje te das cuenta de que esa forma de actuar es la costumbre local, tirarlo todo a la calle y hacer montoncitos para que se encarguen los bichos de ella. Puro reclicaje a la India.


No hay comentarios:

Publicar un comentario